Hemos gritado que no nos representan y que nosotros no somos los responsables, ni ganamos demasiado, ni somos improductivos. Hemos clamado que lo llaman democracia y no lo es, que es en realidad un sistema excluyente que no representa al pueblo. Hemos coreado en las calles que están robando a los pobres y han secuestrado al estado con privatizaciones para enriquecer a los ricos, que siguen sedientos tras largas noches de borrachera. Nos rebelamos contra los recortes de los servicios públicos y el desgaste de nuestros derechos y libertades. Sabemos que la deuda es una estafa y denunciamos que los mercados y los banqueros están por encima de toda ley. Hemos debatido, nos hemos organizado, hemos desarrollado propuestas y en ese proceso hemos tomado conciencia del poder de la ciudadanía (sigue...)
Mientras, la ambición de los que provocaron la crisis, de los que exigen recortes en prestaciones y derechos sociales o laborales, no amaina. Pero hemos iniciado el camino de los que saben que la crisis no es una catástrofe inevitable. Es consencuencia de la especulación y del enriquecimiento de la élite financiera, principal responsable y principal beneficiaria.
El día 15 de Octubre nos reuniremos en las plazas de todo el mundo, porque hemos comprendido que este mundo es uno y es nuestro. No sólo decimos, “pueblos del mundo, ¡uníos!”, lo estamos haciendo. Haremos saber a todos que la re-evolución ha comenzado y que los ciudadanos reclamamos lo que es nuestro, nuestra soberanía.
Hoy seremos mucho más que una gran mancha de puntitos sobre el tablero del mundo. Ya dijimos que no y esta vez lo diremos juntos. No miraremos impasibles cómo se abandona a su suerte a las personas más débiles, en cualquier parte del mundo. No miraremos impasibles cómo el legado de nuestros abuelos, el fruto de las luchas de clases, las lecciones de las guerras que asolaron el siglo XX, son robados a nuestros hijos: los que no tienen trabajo, los que no cotizan, los que no tendrán una pensión digna. Algunos hoy aún juegan en el parque y otros muchos ni siquiera han nacido. Su futuro nos compromete con el presente. Esos, los más pequeños, nos preguntarán algún día, ¿tú dónde estabas el 15 de Octubre?
EL MUNDO ES UNO Y ES NUESTRO
15 DE OCTUBRE FOR GLOBAL DEMOCRACY
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tranquilo, en breve estudiamos tu caso...