sábado, 9 de enero de 2016

Los reyes magos: entre la tradición y la fe



          Después de tanta controversia y cruce de argumentos sobre el tema de las cabalgatas me siento obligado a decir una palabra más extensa de lo habitual. Espero no herir a nadie si afirmo que los reyes magos ni eran reyes, ni eran tres, ni iban vestidos como nosotros los vemos ahora. Más aún, los reyes magos no existieron jamás. Es un relato ficticio del evangelista Mateo para transmitir un mensaje. Sí: un mito religioso, un mito en el que lo que importa es la enseñanza religiosa que se quiere transmitir. Eso dicen los mejores expertos en Biblia del mundo católico. Esto es teología católica de altura.

Las tradiciones religiosas

Tras recibir dos comentarios de sendas amigas y mejores personas a las que tengo en gran aprecio, creo que debo ampliar la reflexión que hice en una entrada anterior a propósito de las cabalgatas de reyes. En dicha reflexión quise diferenciar entre lo que es tradición popular, por tanto modificable, y lo que es fe, es decir, permanente (para los creyentes). En esta siguiente reflexión, dado que los comentarios que he recibido quieren defender las tradiciones, quiero dar mi opinión sobre el concepto de tradición.

Las tradiciones son valiosas y útiles. Pretender eliminarlas es atentar contra un rasgo esencial de la cultura humana. Así mismo, alterarlas sin ton ni son es un disparate. Ahora bien, las tradiciones no son sagradas (son creaciones humanas, por más base religiosa que puedan tener) y, en consecuencia, no son absolutas (pueden ser modificadas).